.Autocuidado.
Que palabra más bonita.
Los autocuidados se definen como «cuidado personal que se otorga una persona a sí misma».
Cuando se habla de «cuidado personal» no solo es ponernos guapetes, hacer ejercicio o comer sano, no. Abarca otros aspectos como pueden ser la sexualidad, la espiritualidad o la gestión emocional sana.
En definitiva, abarca todas las dimensiones del SER (ya sabes, eso que TU eres pero el real, el que quiere comerse el mundo y está esperando a que le des permiso).
A modo de resumen, estos autocuidados podemos dividirlos en cuatro grupos, ¿vamos?:
- Autocuidados físicos.
Son los cuidados que se realizan para tener una buena salud del cuerpo y se suelen dar haciendo ejercicio físico y cuidando nuestra alimentación.
Es importante que no incluyamos las dietas o el ejercicio físico encaminado a «gustar a los demás».
Te confesaré un pequeño secreto…nos han educado todo hacia afuera:
Amar para fuera
Un aspecto físico para fuera
Una inteligencia para fuera
No nos han enseñado a empezar por nosotros/as, de dentro hacia afuera ¡recuérdalo!
- Autocuidados mentales.
Son los dirigidos a mantener una mente sana y ligera. Se incluyen desde buen descanso, eliminar factores estresantes (tanto actividades como personas) o realizar una buena gestión del tiempo.
Dime la verdad, ¿dedicas tiempo a los autocuidados mentales? Aquí tenemos muchos deberes pendientes (¡incluida yo!).
- Autocuidados emocionales.
Son los encaminados a darse cuidados con el fin de realizar una gestión saludable de las emociones, sensaciones y sentimientos que van apareciendo de nuestra vida.
Consiste en poner limites, a saber decir que NO, comunicarse con asertividad, tener una buena autoestima, entre otros.
- Autocuidados espirituales.
Los autocuidados que consisten en actividades que buscan el autoconocimiento del SER, de quienes somos, qué queremos, cuales son nuestros valores y creencias.
Desde el Coaching, el Trabajo Social y la Formación de Buenos Hábitos se practican los autocuidados, la idea es cuánto quieres aplicar esos cuidados a tu vida.
Es pronto, ya lo sé o puede que te estés iniciando en ello. Seas nueva, nuevo o alguien veterano en los autocuidados vamos a respondernos las siguientes preguntas:
- ¿Qué es el autocuidado para ti?
- ¿Practicas el autocuidado? ¿Cuáles son tus prácticas de autocuidados?
- ¿Te cuesta pensarte como alguien que merece cuidados?
- ¿Sientes que tomas consciencia sobre lo que tu cuerpo, mente y espíritu necesita?
Es muy importante que seas honesta contigo mismo, contigo misma.
Este ejercicio es para ti y solo para ti, para que reflexiones si te cuidas, si crees que mereces cuidarte y si lo haces realmente por ti.
Quiero compartirte algo más, no te conozco (o sí) pero puedo decirte que si estás leyendo esto es por algo, no es una mera casualidad:
TE MERECES todo, absolutamente todo lo bueno que te ocurra.
Gracias por leer y, no dudes en compartir si lo necesitas.