Creo que ya os comenté que 2020 no me había sentado muy bien, ¿verdad? Pues si no os lo he dicho, ya quedáis informadas e informados.
Bueno pues he decidido que «ya está bien».
Esta semana os puedo decir que ha estado llena de pequeños descubrimientos y uno de ellos ha sido que la etapa de #Resurgir se me ha quedado pequeña. Sí, ya no puedo seguir en ella porque ya ha cumplido su función. Ahora es tiempo de crecer, de romper y por ello el nombre de mi nueva etapa es #ReEvolución.
He conectado con mi visión, mi nueva visión y estoy preparada para alcanzar cada una de las cosas que me he propuesto conseguir.
Para quién no lo sepa, la visión es dejar de anclarte en el pasado y conectar con el futuro. Es visualizarte en lo que quieres SER, conectar con ello y emprender un plan de acción para conseguirlo.
El plan de acción es crucial porque una visión sin acción es como soñar despierto/a y aunque suene muy poético y maravilloso…genera una frustración que te ca**s.
¿Y por qué os cuento esto? Porque me gustaría que si algo en ti resuena con lo que te estoy contando piensa que nunca es tarde para alcanzar lo que quieres, ni para creer que te mereces cada buena cosa que te pase en tu vida. Anclarnos en el pasado, en lo cómodo es normal y nos pasa absolutamente a todas las personas de este mundo pero nuestro SER no ha nacido para conformarse (o sí, eso es responsabilidad tuya).
¿Empezamos ya o qué?