Después de unas renovadas vacaciones, regreso con las pilas cargadas y con muchos proyectos que quiero compartir contigo.
¿Cómo has iniciado este mes? Eres de las personas que tienen el llamado “síndrome post -vocacional” o eres de los/as que se lo toman como si fuese enero. Sea como sea, es un inicio y todos los inicios tienen sus cosas buenas y malas.
¿Lo mejor? Poner el FOCO en lo bueno, aunque ya se lo que me vas a decir, es difiiiícil pero no imposible (giño giño).
Quiero compartirte algo que me sucedió la semana pasada, en un concierto.
El jueves pasado estuve en el concierto de Fangoria (sí, me encanta). Y ahí estaba, LA canción, MI canción.
Todos los momentazos o situaciones que has vivido tienen una banda sonora concreta. Vamos, piénsalo. Seguro que tienes una, bueno miento, tienes varias pero seguro que hay una que marca tu momento actual.
La canción de mi #Resurgir es “Dramas y Comendias”, de Fangoria.
Disfrute en el concierto, muuucho pero te mentiría si no te diría que estaba esperando que sonara esa canción. Cuando sonó, salté, grité…los pelos de punta. Pero ¿sabes lo que más me llamó la atención?
Que esa canción no era solo mía, era de muchas personas más. No solo era yo la que estaba gritando, no era la única que saltaba…la energía que se generó con esa canción fue espectacular.
Fantasé pensando que muchas personas de las que estaban allí habían pasado un proceso (de m*3rd@) como yo.
Pensé que alguien se había cansado de aguantar.
Que se habían cansado de llorar.
Habían puesto punto y final de tanta y tanta basura.
De tanto odio hacia sí misma.
Y de tantas escusas para no avanzar.
Y que ahí estábamos todos, siendo nosotros mismos, nosotras mismas: con nuestras sombras y nuestra luz; con nuestra tribu; con nuestros quebraderos de cabeza y nuestras ralladas estúpidas.
Allí viviendo el pu*o momento, libres.
También me gusta pensar que tu también te encuentras en ese momento, en el de ser libre, el de SER tu mismo, tu misma sin importar el qué, el dónde o el con quién.
Ahora, ponte esa canción: cierra los ojos, vívela, cántala, baila, ¡haz lo que quieras! Imagina como sería si…. Lo dejo a tu elección.